miércoles, 5 de febrero de 2025

Por la seguridad de los espacios comunitarios


El año 2021 se le dió apañe gratis, por un par de días, a una persona de otra ciudad en Espacio El Naranjo. Esta persona terminó quedándose a la mala casi 5 meses. Causando graves problemas, atacando física y verbalmente a gente de la casa y visitas. No aceptó que le hayan dicho que su conducta no tenía justificación. No aceptó que, por nuestra seguridad, no hayamos querido seguir compartiendo la palabra ni el espacio.

Mediante asamblea y de manera unánime se decidió solicitar su salida, solicitud que no fue acogida y terminó en que los miembros del espacio (me incluyo) prefirieran no dirigirle la palabra para evitar aun mayores conflictos.

Por otro lado, nuestro espacio seguro y gratis siempre estuvo disponible, fuimos empáticos al brindarle alojo hasta que juntó el dinero necesario para irse, siempre confiamos en su palabra. 

Es importante aclarar que nunca ejercí violencia física ni verbal contra esta persona. Ni tampoco lo presencié desde algun otrx compañerx.  A lo máximo que llegué, tal como su relato confirma, fue a levantarle la voz en una sola oportunidad. Es importante destacar que en todos los hechos existen testigos tanto de la casa como de fuera. Y quiero aclarar que la situación mencionada fue a causa de la mala relación de convivencia y en ningún caso fue producto de una conducta misógina.

A mas de tres años de estos hechos, esta persona junto a otras que apoyan su violencia física y verbal, que no respetan un espacio comunitario, ni la decisión de la asamblea, intentan destruir el trabajo colectivo que venimos realizando hace años. 

Sepan que autoritarios son quienes intentan imponer sus posiciones en colectivos donde no activan. 

Totalitarios y dictadores son quienes intentan invalidar a alguien porque tiene una visión diferente de la solidaridad, que apoyar a un preso político no te hace parte de la ideología o partido al que el preso adhiere. 

Ese tipo de sectarismo no contribuye a las transformaciones sociales ni a la construcción de espacios comunitarios seguros.

Gente que confunde violencia política con violencia contra sus mismxs compañerxs, contra sus espacios, no han entendido nada.

Anarquistas no tienen la razón por gritar muerte al estado. Feministas no tienen la razón por gritar muerte al patriarcado. Estas premisas se van construyendo a diario, en procesos colectivos e individuales, con errores y aciertos. 

Interpretar y describir son dos procesos diferentes. Cuando digo que echamos de nuestra casa a una persona por su conducta violenta, no estoy interpretando, estoy describiendo los hechos. Por el contrario, la persona que echamos y la gente que la defiende, quieren construir una realidad en base a sus interpretaciones y de este modo relativizan los hechos: su violencia. No tengo claro si eso lo hacen a propósito o no se dan cuenta. Lo claro es que están pasando a llevar la decisión asamblearia de un espacio comunitario y atacandome por responder de manera pacífica ante un problema violento. Transformando este conflicto en un problema de genero, cuando nuestro espacio se construye con mujeres y disidencias y nunca habíamos tenido un problema como este. 

La violencia es contra el paco, contra capitalistas, contra el violador, contra  golpeadores, pero no contra compañerxs con quienes hay diferencias políticas.  

Sabemos que la persona X, actualmente trabaja en la Municipalidad de Recoleta (comunista?). Sabemos que junto a las personas que la defienden, son gente con título universitario, que trabajan y postulan a proyectos financiados por el estado. Desde cargos de poder y posiciones de privilegio juzgan y atacan, confirmando que el rico define lo que es bueno o malo y que el pobre, sin derecho a defenderse, debe obedecer sus sentencias. 

Esta gente no tiene hechos ni testigos para confirmar sus discursos. Lo único que tienen es el pantallazo de un correo que envió la persona X a un organismo del estado para que interviniera un Espacio Comunitario que no reconoce tutelas de ningún organismo externo, menos del estado. La persona X es conocida por apoyarse en organismo del estado (trabaja para ellos) y en la policía para destruir espacios, ya lo hizo en su ciudad natal, Punta Arenas, atacando a otras compañeras para apropiarse de una casa. 

Los espacios comunitarios y organizativos horizontales se deben a su asamblea y solo es ella quien, después del ejercicio colectivo (no individual ni de caudillo), determina posiciones y con quien colabora, o no, para conseguir sus objetivos.

Nuestro espacio seguirá abierto y apañando a gente, bandas y colectivos que lo necesiten, porque sabemos que en Santiago no quedan mas de 3 lugares como este y que es el único donde el dinero no importa. Aquí no corre el pensamiento burgués de la retribución en nombre del apoyo mutuo. Aquí el compromiso es voluntario.

A quienes les moleste la comunidad que construimos, pónganse a la fila con los pacos, fascistas y agentes del estado, que para la revolución no conocemos dias libres.

Por último, antes de confirmar con su discurso que odian el sindicalismo y a los comunistas, esclarezcan para quien trabajan, cual es su profesión, donde estudiaron, quien les financia, de donde son sus familias y a que ideología responden. Por este lado no hay miedo en confirmar lo que todo el mundo sabe: pura clase obrera, digna y sincera. 

Esta es la última vez que me referiré a estos hechos, porque ante gente de dudosa procedencia, vinculada al poder político y económico, que tienen mas de 35 años, pero que nunca antes se le vió por nuestros espacios y que atacan destructivamente sin pruebas ni testigxs, no hay nada más que transparentar. 

Con el alma llena de banderas, Ismael Libertad.

Anarquía y Paz.